
¿Cuántas veces sentimos que nuestra vida puede mejorar, pero no sabemos por dónde
empezar? Por eso, aunque suene trillada, una de las claves está en poner foco en las
pequeñas cosas que pueden hacer la diferencia en tu rutina. Nuestros hábitos cotidianos son
los que nos acercan o alejan de nuestros deseos y objetivos.
La conquista de uno mismo para lograr aspiraciones es un proceso que debe darse a lo largo
de toda nuestra vida. Se trata de cuestionar nuestros propios hábitos y animarnos a salir de
la zona de confort para dejar atrás costumbres nocivas y creencias erróneas. La superación
personal implica no solo un fuerte compromiso de nuestra parte sino también un
crecimiento y desarrollo de nuevos comportamientos, ideas o rutinas que te llevarán a tu
mejor versión.
Sin embargo, esta autorrealización no debe ser una estrategia única, sino una evolución a
largo plazo que va creciendo continuamente. Según Vishen Lakhiani, emprendedor y orador
motivacional, no es funcional devorarse un libro en un solo día. Él recomienda dedicarse a la
lectura diariamente para que las ideas se construyan y comiencen a ser parte de tu vida. Por
lo tanto, tomar conciencia de la importancia que tienen los pequeños hábitos en tu día a día
te puede permitir crear, como dice James Clear en su libro “Hábitos Atómicos” un sistema de
cambio real y que perdure en el tiempo.
Lo mismo sucede con la superación personal. Tratar de incorporar un conocimiento nuevo
en una sola sesión es una propuesta, como mínimo, arriesgada. De acuerdo con la
Universidad de Waterloo, la mayoría de las personas olvidan aproximadamente la mitad de
lo que acaban de aprender en una hora, a menos que lo pongan en práctica
inmediatamente.
Por lo tanto, la clave es hacer de la superación personal un hábito diario, dedicarle un
momento del día para desarrollarnos en algún área que nos interese. Podés destinar 20
minutos a realizar un curso en línea, buscar dormir más y mejor, realizar ejercicios cada vez
más intensos o meditar con alguna aplicación o música que te inspire. Estos pequeños
cambios en tu rutina, harán que tus objetivos sean más perdurables en el tiempo y, a la
larga, parte de tu vida y de tus hábitos “no negociables”.
Queda claro entonces que para lograr grandes resultados no necesitamos de grandes
acciones sino mejorar un poco todos los días.
El proceso de superación personal se traduce en múltiples beneficios: nos permite conocer
nuestras capacidades, mejora nuestras relaciones interpersonales, aumenta nuestra
autoestima y nos convierte en personas más optimistas, fomenta nuestra trayectoria
profesional y nos abre los ojos hacia un mayor aprecio por la vida.
Retomando a Clear, cabe aclarar que estos beneficios no son inmediatos, por eso es clave
trabajar con un sistema para no perder la motivación, porque en este mundo fast-life la falta
de resultados rápidos suele llevar a la frustración porque lo que esperamos no sucede
cuando queremos.
En “El poder de los hábitos”, Charles Duhigg afirma que los hábitos son una suerte de atajo
que sirven para simplificar la toma de decisiones ya que hacen que nuestro cerebro no gaste
energía de más en actividades rutinarias. Por ello es que incorporar hábitos es la manera
más efectiva de aprender, practicar, hacerlo simple y actuar.
Claro que incorporar un hábito requiere de voluntad, constancia y paciencia. Pero también
les aseguro que se obtienen resultados que muchas veces superarán las propias
expectativas.
Les comparto un ejercicio de consciencia sobre hábitos para revisar
escribe 3 hábitos para CONTINUAR
escribe 3 hábitos para CAMBIAR
escribe 3 hábitos para COMENZAR
Y dos libros que valen la pena leer si quieren profundizar
- Clear, James. 2018. Hábitos Atómicos. Paidós
- Duhigg, Charles. 2019. El poder de los hábitos. Vergara.