Primero definamos los conceptos claves:
Computación tradicional: es un sistema de computación rígido y lineal basado principalmente en la lógica que solo puede emplear datos estructurados y ultra organizados. Es un sistema obsoleto que no evoluciona con las personas en materia de lo que se está aprendiendo.
Computación cognitiva: es un sistema de computación totalmente revolucionario que permite a las personas encontrar respuestas, nuevos conocimientos y percepciones en grandes volúmenes de datos. Es llamada computación cognitiva, pues es un sistema que es capaz de razonar, comprender, percibir y aprender sobre algún conflicto o problema tal cual como lo haría un ser humano. Las soluciones informáticas cognitivas tienen la capacidad de entender datos poco organizados y desestructurados. Es debido a lo anterior que es posible que podamos encontrar información totalmente nueva que ni siquiera se haya pensado, no conocida. En otras palabras, es un sistema de aprendizaje continuo basado en el lenguaje natural, que permite comprender la intención real del lenguaje de la persona. Los sistemas computacionales cognitivos se vuelven más inteligentes a través de la relación e interacción con los usuarios y de sus aciertos y errores, tal cual lo hace una persona común y corriente. Ya no se trata solo de una máquina, se puede ir transformando perfectamente en el complemento perfecto y mejor aliado de las personas, en la búsqueda de respuestas a peguntas cada vez más complejas.
¿Cuál es el aporte de la computación cognitiva al marketing digital?
A través del uso de datos masivos la computación cognitiva es capaz de anticipar resultados y entregar recomendaciones. También tiene capacidad de poder comunicarse con los seres humanos de forma natural y en el momento preciso, lo cual otorga a los especialistas en marketing la posibilidad de comprender los intereses y acciones de los clientes a un nivel muy específico, e incluso personalizar estrategias de contenido de alto impacto.
Además de lo anterior la computación cognitiva ayuda a los especialistas de marketing a tomar decisiones estratégicas más pertinentes basadas en los datos que entregan los clientes en cada interacción.
Por último, es importante recalcar que el uso de la inteligencia artificial aporta mucho en términos de eficiencia, puesto que permite entre otras cosas, entregar respuestas más rápidas y efectivas a los clientes o generar un mayor aumento de potenciales clientes en menos tiempo y a un costo más bajo, por ejemplo.